Finalmente se acabó el año 2020, un año difícil para todos. Un año donde muchos enfermaron, otros perdieron seres amados. Algunos perdieron sus trabajos, y los niños dejaron de ir a la Escuela. Los parques se cerraron, las tiendas, restaurantes, ¡y hasta Iglesias! Virus, desastres naturales, disensiones políticas y todo tipo de males. Esto me hace pensar en Job.
Job perdió todo en el transcurso de un día. Perdió sus posesiones, familia, salud y amistades.
También tenemos el ejemplo de Noemí, quien perdió a su esposo e hijos en un periodo de tiempo muy corto.
Por otro lado está David y Elías, huyendo y escondiéndose de sus enemigos.
¡Y ni hablar de José! Maltratado y vendido como esclavo por sus propios hermanos.
O la mujer del flujo de sangre, que sufrió de este padecimiento por muchos años sin encontrar una cura.
Y a lista continúa...
Por eso es que Jesús dijo: "Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo". Juan 16:33
Es verdad, no siempre las cosas salen a nuestra manera. Muchas veces quisiéramos regresar el tiempo y evitar ciertos sufrimientos. Pero Jesús conoce exactamente cómo nos sentimos. Él entiende nuestro dolor, enojo, tristeza o desesperación.
Sin embargo, la historia no termina ahí. La Biblia nos enseña que Dios hace todo nuevo.
Él es quien restaura, consuela y edifica. El levanta huesos secos y les dá vida.
Así que, este año que comienza tenemos la oportunidad de ver las Bendiciones de parte de Dios, porque sus misericordias son nuevas cada mañana.
Aún si el año 2021 no sea perfecto, recuerda que Dios sigue siendo Fiel.
Él está contigo, y eso es lo más importante que debes tener.
Deja que Dios sea tu fuente de gozo en todo lo que emprendas.
FELIZ AÑO NUEVO!
Comments